Inversiones ESG: ¿Por dónde empezar?
Un número creciente de inversionistas, particulares e inversores institucionales se están adhiriendo a las estrategias ESG (Environmental, Social and Governance), que establecen un conjunto de criterios para la selección de inversiones. El término inversiones ESG apareció en 2004, en el informe “Who Care Wins”, creado por el Pacto Global de la ONU en asociación con el Banco Mundial para provocar a las instituciones financieras en relación con la integración de los aspectos ESG en el mercado de capitales.
Las inversiones ESG son aquellas que priorizan empresas con buenas prácticas ambientales, sociales y de gobernanza. Es un tipo de inversión que busca conciliar principios de sostenibilidad, evaluando si las acciones de la empresa mitigan los riesgos relacionados con el tema, con retornos consistentes y un nivel de riesgo aceptable.
Dentro de este asunto, la SEC (Securities and Exchange Commission), la institución que regula el mercado de capitales de EE. UU., anunció este año que exigirá a las empresas listadas en el país que divulguen informaciones sobre los impactos climáticos. En Brasil, también se espera que la Comisión de Bolsa y Valores (CVM) requiera más información ESG de las empresas a partir de 2023.
Para incorporar la estrategia ESG en las inversiones, es necesario alinear los objetivos que guían la gestión del portafolio de la persona u organización. Es necesario tener en cuenta las características deseadas de los activos elegibles que compondrán la cartera en su conjunto, por ejemplo, cuál será el tipo de activo (renta fija o variable), cuál es la proporción de cada tipo de activo en el portafolio y cuáles son las correlaciones entre estos activos.
A partir de ahí, buscamos establecer parámetros para la selección de inversiones, como un proceso de portafolio screening (Clasificación), que debe basarse en los valores del inversor y determinará qué proyectos y empresas pueden incluirse en el portafolio. Entre los tipos de portafolio screening, lo Principles for Responsible Investment (PRI) se destaca:
- Negative Screening: Son excluidos del análisis ciertos sectores, emisores o valores debido a un desempeño ESG deficiente; o sectores/actividades consideradas cuestionables (por ejemplo: tabaco, alcohol, industria armamentista, etc.);
- Norms-based screening: es realizada la clasificación de los emisores según los estándares mínimos de la práctica comercial con base en normas internacionales relevantes, como los emitidos por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), la Organización Internacional del Trabajo (OIT), las Naciones Unidas (ONU) y UNICEF. El filtro basado en normas es, por lo tanto, una subcategoría de clasificación negativa que excluye empresas o bonos del gobierno debido a cualquier falla del emisor en no cumplir con los acuerdos internacionales de sostenibilidad;
- Positive Screening: invertir en sectores, emisores o proyectos seleccionados para lograr un desempeño ESG positivo en relación con sus pares de la industria; inclusión activa de empresas en función de los beneficios sociales o ambientales de sus productos, servicios y/o procesos; o el desarrollo temático positivo, como es el caso de empresas en transición, tecnologías renovables/limpias, empresas o iniciativas sociales.
¿Cómo medir el costo-beneficio de un instrumento financiero ESG?
Algunas formas pueden ser útiles para medir la relación entre el rendimiento y el riesgo, y dar una indicación de la relación costo/beneficio de una inversión. Una de ellas es adoptar un benchmark, un activo de referencia en que se puede comparar rentabilidad/riesgo en un periodo determinado. En Brasil, los principales puntos de referencia son las tasas de los Certificados de Depósito Interbancarios (CDI) y el índice Ibovespa, pero se pueden utilizar varios otros, como los índices IMA (Índice de Mercado AMBIMA – Asociación Brasileña de Entidades Financieras y del Mercado de Capitales), el Índice amplio de Precios al Consumidor (IPCA), etc.
Otra forma es utilizar métricas de optimización de portafolio para ajustar la relación riesgo/rentabilidad, buscando aquellas en las que dicha relación sea más favorable desde el punto de vista del inversor. De esta forma, es posible elegir cuál es el activo más atractivo para componer el portafolio. Para ello, es necesario conocer el proprio perfil de riesgo, las necesidades inmediatas y de mediano y largo plazo.
Finalmente, es necesario analizar la huella sostenible de los activos. Así, uno de los criterios que se utilizan a menudo en esta selección es buscar inversiones que formen parte de índices de sostenibilidad o cuenten con certificaciones verdes. Esa iniciativa busca reducir el costo de verificación y monitoreo por parte del inversionista, dado que los activos ya han sido certificados por una tercera parte.
Mientras tanto, se considera que esta verificación puede no ser suficiente para seleccionar activos sostenibles, ya que las metodologías se revisan y mejoran constantemente, y pueden tener fallas de clasificación. Estas verificaciones iniciales tienen como objetivo reducir el universo de análisis y no necesariamente excluir activos que no forman parte de él.
Formas de inversiones ESG
Títulos temáticos
Las principales clasificaciones de los bonos temáticos son las categorías verdes, sociales o sostenibles, son instrumentos de deuda negociados en el mercado de capitales con el propósito de atraer capital para inversiones con los fines antes mencionados. Generalmente, estos recursos financian proyectos de largo plazo, siendo una importante alternativa para estimular y viabilizar iniciativas y tecnologías con externalidades positivas en diferentes tipos de organizaciones.
La inversión en valores certificados tiene como objetivo reducir el costo ambiental de la due diligence. Además, tienden a reducir el riesgo moral de la inversión, debido a la declaración de la aplicación de los recursos a recaudar por el bono, la definición de indicadores y las formas de monitorear los resultados financieros y ambientales.
Índices de sostenibilidad
Con la creciente preocupación por los aspectos ESG, se crearon indicadores para evaluar el desempeño de la sostenibilidad de las empresas que cotizan en las bolsas de valores. En un escenario de diversas posibilidades para el análisis de los aspectos socioambientales, el surgimiento de índices de sostenibilidad ayuda en la formación de un modelo de comparación entre empresas.
Los índices incluyen empresas que siguen un determinado estándar empresarial y adoptan criterios socioambientales. Así, ayudan a los inversionistas en la elección de empresas y acciones para invertir, sirviendo como criterio principal o complementario. Como ejemplo de índices, podemos mencionar lo Dow Jones Sustainability Indexes (DJSI) y el FTSE4Good Index Series,de la bolsa de valores de londres.
Fondos de Inversión
Un fondo de inversión, por su parte, funciona como una puesta en común de recursos, constituidos en forma de condominio, destinados a la inversión en activos financieros. Las acciones de los fondos son fracciones ideales de su patrimonio, de manera las ganancias o pérdidas que se obtengan de las inversiones son divididas entre los inversionistas en la misma proporción de la inversión realizada en dicho fondo.
Es necesario identificar la clasificación de estos fondos en cuanto a los activos invertidos y la forma de administración, entre los cuales podemos mencionar: fondos de inversión en acciones; fondos de inversión de renta fija; Exchange Traded Fund (ETF); y fondos de inversión de capital. Además, algunas políticas de inversión pueden estar más enfocadas en temas sociales o ambientales, sin que necesariamente ambos estén presentes.
En Brasil, existe una creciente oferta de fondos de inversión denominados ESG. La Asociación Brasileña de Entidades de Mercados Financieros y de Capital (ANBIMA) tiene la Guía ASG II, que proporciona referencias para ayudar a los gerentes a comprender estos aspectos ESG. A partir de 2022, su registro de nuevos fondos de renta fija y renta variable requerirá la identificación de fondos sostenibles, que tengan un objetivo definido en la regulación, procesos y metodologías que acrediten el compromiso ESG, además de un seguimiento constante de la cartera.
También están los Fondos ESG, de Capital Reset, en los que se mapearon 88 fondos disponibles para el inversor venta minorista.